Feministas, cariñosas y no tan radicales...



Me he encontrado con muchas mujeres que no les gusta decir que son feministas aunque en su pensar y actuar se acerquen mucho. Tal parece que en el fondo temen pertenecer a un grupo radical que no quiere a los hombres o que declarar sus convicciones alejará a los galanes.
Sin embargo lo mejor de ser feminista es encontrarse a sí misma como un ser independiente, respetuoso, completo, dispuesto a compartir y uno de los beneficios es que optamos por hombres que aprecian esas cualidades como básicas para relaciones sanas, llenas de amor y crecimiento.
En una de mis lecturas encontré esta nota que fortalece esta idea y estoy tan feliz de su publicación que la retomo para compartirla...

No tan radicales...

Aunque algunos piensen lo contrario, las feministas tienen relaciones románticas más plenas que las mujeres de ideas conservadoras.
La revista Sex Roles, publicó la investigación de la Universidad Rutgers, en Nueva Jersey, cuyo objetivo era analizar cómo es la vida en pareja de una mujer radical.
La encuesta hecha entre 531 personas de ambos sexos mostró que quienes defienden sus ideales feministas establecen vínculos más sólidos y sanos.
Además sus parejas viven enamoradas y sexualmente satisfechas. Eso quizá se deba a que cuando una mujer expresa sus convicciones y exige respeto a su género, demuestra una mayor firmeza de carácter, actitud que cautiva a los hombres.

Revista: Psychologies / Febrero/ México/Página 16.

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